SOLEDAD LLENA, Sonetos del destino (1944-1945), Secreta Fuente (1948)


OH clara soledad de estos instantes
en que nada me acosa ni atropella.
Noche de centinela; luna, estrella,
amor para mis sueños vigilantes.

Oh clara soledad, astros amantes
diamantes de la noche tersa y bella.
Oh vuelo del espíritu hacia aquella
profundidad de tiempos ya distantes.

Huida, fuga, vuelo enamorado
por los sumisos aires del recuerdo
para traer la vida a nuestro lado.

Gozosa soledad, que por ti muerdo
sobre la nueva pulpa del pasado
el dilatado amor en que me pierdo.


GRITO, Sonetos del destino (1944-1945), Secreta Fuente (1948)

  
SOLITARIO, desnudo, muerto, grito,
último grito de mi entraña rota,
que al abrasar el aire, llama ignota,
frío quedó, buscando su infinito.

Burla del eco, sombra que repito,
inútilmente triste en su derrota,
muerta voz que la vida me alborota,
por quererme nacer, nuevo apetito.

Grito mío, candente, el aire helado
que surcaste, cometa de mi entraña,
que tu amor, de tu ardor, quedó abrasado;

tus golpes socavaron la montaña,
los mares y los cielos se han domado
¡y tú no has muerto, grito de mi entraña!